CONSEJOS PARA ELEGIR UN BUEN CALZADO INFANTIL
Se acerca la “vuelta al cole” y el momento de comprar calzado nuevo a nuestros pequeños. Los pies de los niños crecen a pasos agigantados, se estima que cada tres meses pueden llegar a crecer entre 7 u 8 milímetros y es el momento de calzarlos con el zapato adecuado.
La elección del calzado para los niños se convierte en una cuestión fundamental, es uno de los temas que deben ocupar tiempo a los padres, ya que con ello estaremos favoreciendo o perjudicando el desarrollo del pie de los niños y su caminar.
Escoger un modelo que se adapte a sus necesidades motrices, permitiendo el correcto desarrollo del pie y del resto del aparato locomotor y respetando la fisiología así como la biomecánica del pie, no es tarea fácil. Desde la clínica os dejamos unos consejos que seguro que os resultan útiles y os facilitan la elección de un buen calzado infantil.
- Deben de ser lo suficientemente anchos en la parte delantera para permitir el libre movimiento de los dedos favoreciendo así la estimulación de la musculatura intrínseca del pie y evitando la atrofia de la misma.
- El zapato se debe adaptar bien al pie, quedando éste bien sujeto en su interior mediante cordones o velcros.
- El material debe ser transpirable, para evitar el exceso de sudoración.
- Los zapatos deben llegar hasta debajo de los huesos laterales del tobillo, nunca deben de sobrepasar estos huesos. En caso de botas, éstas deben de ser de un material flexible, que permita el movimiento del tobillo.
- La suela debe de ser material flexible, ligero y que proporcione buen agarre.
- El tacón no debe sobrepasar los 1o mm.
- La plantilla del calzado tiene que ser plana y flexible, nunca deberá llevar una plantilla correctora salvo prescripción del Podólogo.
- El mejor momento para comprar el calzado, es a última hora del día, puesto que los pies es cuando más hinchados se encuentran. Se deben probar con calcetines puestos y de pie, cargando el peso del cuerpo sobre el calzado. Es recomendable que haya un espacio de entre 5 y 15 mm entre la punta del dedo más largo y la punta del calzado
- Los zapatos cumplen su función en la calle, pero en casa siempre es recomendable dejar el pie libre. Podemos utilizar calcetines antideslizantes o zapatillas, son mucho más cómodas y permiten que el pie descanse.
Errores frecuentes al elegir el calzado infantil
–Elegirlos demasiado grandes. A veces se compran zapatos de un número mayor del que el niño necesita para que le duren más tiempo. Esto favorece que al niño le resulte muy difícil caminar, ya que el pie le baila y se le sale constantemente, favoreciendo posturas de los dedos que a la larga son perjudiciales y pudiendo provocar caídas.
–Abusar de las deportivas. Conviene que los niños las usen con moderación y los días en los que realmente vayan a realizar alguna práctica deportiva, ya que la mayoría de este tipo de calzado está fabricado de materiales plásticos que favorecen una sudoración excesiva.
–Heredar. Es muy frecuente que los niños hereden zapatos de sus hermanos mayores o de otros niños de la familia. Sin embargo, es una práctica poco recomendable, ya que los pies son siempre anatómicamente diferentes y cada niño tiene una forma distinta de caminar. Unos zapatos usados pueden estar deformados o viciados pudiendo perjudicar la biomecánica del niño. Por eso, salvo que estén completamente nuevos, es mejor no usarlos.
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